PIRINEOS-VALLE DE ECHO-3ª RUTA-SELVA DE OZA-REFUGIO FORESTAL- CIMA CASTILLO DE ACHER

3ª RUTA -2 DE JULIO 2013: SELVA DE OZA-REFUGIO FORESTAL- CIMA CASTILLO DE ACHER

Mapa y perfil de la ruta, pinchando se amplian                      TRACK PARA GPS

LUGAR INICIO Y ALTITUD: Parking y refugio Selva de Oza (1125 m.)

HORA INICIO DE LA RUTA: 8:35 horas.

HORA TERMINACIÓN DE LA RUTA: 16:45 horas.

TIEMPO REAL EN MOVIMIENTO, ANDANDO: 6:40 horas.

TIEMPO TOTAL EMPLEADO: 8:10 horas.

KILÓMETROS RECORRIDOS: 14,8 km.

ALTITUD ACUMULADA: 1310 m.

DESCENSO ACUMULADO: 1310 m.

NIVEL Y DIFICULTAD RUTA: Alto, sin dificultad técnica, únicamente muy fuerte desnivel, tramos del 45%, y piedra suelta descompuesta.

COTA MÁXIMA CORONADA: Cima Castillo de Acher (2384 m.)

TIEMPOS DE PASO: Selva de Oza -Refugio Forestal : 4,- km. ; 2:00 horas ; 600 m.a.a.

Refugio Forestal – Collado Castillo de Acher : 2,5 km. ; 1:30 horas ; 500 m.a.a.

Collado Castillo de Acher – Cima Castillo de Acher : 1,- km. ; 0:20 horas ; 150 m.a.a.

Cima Castillo de Acher – Refugio Forestal : 3,5 km. ; 1:40 horas ; todo de bajada

Refugio Forestal – Parking Selva de Oza : 4,- km. ; 1:20 horas ; todo de bajada.

ALOJAMIENTO, DESAYUNO Y CENA: En Siresa Hotel Restaurante Castillo d'Acher, hotel familiar, con excelente trato del personal, buenas cenas y mejores desayunos, hasta nos poníamos la comida con las sobras del desayuno.

COMENTARIOS: Ruta reina de nuestra expedición, para lo cual madrugamos un poco más, muy pronto estábamos en el punto de salida, se notaba en la gente un poco de impasse, la clásica preocupación de saber cómo íbamos a responder.

Desde las furgonas antes de empezar, la mirada a lo que nos esperaba, nuestro objetivo, inmensa muela, hermosa cumbre calcárea que, a pesar de su relativa poca altitud, destaca con aspecto de fortaleza inexpugnable sobre la Selva de Oza. 

Castillo de Acher desde las furgonetas

La parte superior de la montaña es realmente impresionante, una inmensa terraza inclinada, toda ella formada por roca caliza agrietada, con sumideros y hoyos.

Loma del Castillo de Acher, al fondo su cima

Para esta ruta ya se quedaron en el hotel tres, la idea era llegar los 22 restantes hasta el refugio forestal y allí cada uno que decidiera según sus fuerzas, todos llegamos al refugio unos antes y otros después.

Castillo de Acher visto al inicio de la subida, en su base

En el refugio optaron por quedarse cinco y esperarnos, pues la idea era subir, hacer cima y volver a bajar y comer en el refugio, muy buena idea la de comer en el refugio, pues la bajada hasta el refugio es de “ÓRDAGO A LA GRANDE”.

Gran día para hacer esta ascensión, incluso nos respeto el sol. Nos lanzamos para arriba 17 incluido el guía (Hector), todos hicimos cima, tampoco teníamos dudas de que así sería.

Después de comer y a 2,5 kilómetros de las furgonetas, al cruzar uno de los barrancos, dimos rienda suelta a nuestros impulsos, refrescándonos en sus frías aguas, que tampoco las encontramos tan frías, “sería por la calor y cansancio que llevábamos”, pero contentos y felices por haber hecho una extraordinaria ruta. 

Haciendo cola para meter la cabeza debajo de la cascada

¿que le pasaría a Juanjo?, cosa del agua del Pirineo

 

Una vez en las furgonas, hartos de cerveza, nos recreamos descansando en la hierba hasta 45 minutos observando lo que horas antes habíamos subido y bajado.

Objetivo cumplido, satisfechos

ITINERARIO: Gran ruta lineal, de ida y vuelta por la misma senda, sin dificultad técnica, exige buena preparación física y estar acostumbrado sobre todo a bajar, por terreno muy descompuesto, aunque tampoco hay peligro si te das una culada.

La ruta la iniciamos en el parking de la Selva de Oza, cruzamos el río Aragón Subordán por el puente de la carretera único sitio de hacerlo, giramos a la derecha y muy pronto estamos en el sendero de subida.

Inicio de la subida entre gran bosque de hayas y algún pino

Desde el principio se trata de subir y más subir, prácticamente sin descansos por un precioso bosque de hayas, con fuerte subida, el sendero sin problemas de seguimiento, nos lleva a una loma-pradera, este año llena de flores, preciosa.

Conforme ganamos altura las hayas se convierten en prados de hierba

Nos desviamos a la derecha hasta un refugio, donde hacemos una “pica-pausa” de 15 minutos, hemos subido 600 m. en 4 km., aquí se quedan cinco, y parte de nuestro peso mochilero.

Empieza lo bueno, primero por senda con hierba, bastante llevadera la pendiente,

Iniciamos la gran subida al Castillo

pude fotografiar este Tritón, en uno de los arroyos

pasamos un gran nevero con las debidas precauciones

y nos enfrentamos al tramo más peliagudo, muy fuerte pendiente por roca descompuesta, y sendas por todas partes lo que suele pasar en estos casos,

la pendiente se las trae, de las que te tienes que agarrar bien, por que te vas pa-trás

hay que seguir recto para arriba por la brecha, en la parte alta alguna pequeña trepa dita y por la canal llegamos al collado (al parecer es el único paso accesible para esta cima, al no ser con escalada), ya que toda ella esta rodeada de cinglos, es muy parecida a una gran muela.

 

Hector, como buen guía, recibiéndonos en el collado

Una vez en el collado se trata de seguir el sendero por la ladera y cresta de la derecha hasta la cabecera donde cruzamos, y a la izquierda está la Cima del Castillo de Acher (2384 m.).

antes de hacer cima todavia quedaba pasar algún nevero y una buena subida

Unos antes y otros después, con más o menos esfuerzo los 17 hicimos cima.

Por fín todos en la cima

Amparo y Lola se felicitan, el esfuerzo está en el rostro

Las vistas son inmensas, el día fabuloso, quince minutos de descanso recreándonos y para abajo.

Lola y yo, posando en la cima

La bajada por la misma senda de subida, desde el collado hasta el refugio la bajada es fortísima, cada uno baja por donde mejor sabe y puede, el último que llegó al refugio fui yo a las 14:40 horas.

Menuda bajadita, cada uno por donde mejor lo veía, las féminas con el guía

Héctor y Javier, entrenando en el nevero

Comimos y descansamos treinta minutos y a seguir bajando, que todavía quedaba lo suyo por bajar,

Lo acabábamos de  bajar

a mitad de camino el agua milagrosa y reconfortante del arroyo hizo su reparación, 

para terminar bajando por el mismo bosque de hayas que la iniciamos.

En resumen, una gran ruta clásica en el Valle de Echo, muy exigente, imprescindible realizar.